Han pasado las fiestas y todos los exceso cometidos durante ellas, ahora, nos pasan factura. Las copiosas comidas y cenas navideñas han quedado atrás y debemos volver a nuestra dieta habitual aunque nos cueste. Personalmente, he cogido unos kilillos y ahora debo apretarme el cinturón a base de comidas sanas y bajas en calorias.
He escogido para empezar «mi dieta» esta crema de calabaza, por su ligereza y apetitoso sabor, llena de vitaminas y minerales. Como la calabaza tiene un sabor dulzón la he acompañado de otras hortalizas para contrarrestar y mezclar sabores. Vamos a darnos solo una ligera concesión: los quesitos light y un chorrito de nata que ponemos al final, lo demás son hortalizas ligeras que nos llenan el estómago y el paladar.
Ingredientes para 4 personas:
- 2 puerros.
- 1 patata gorda.
- 2 rodajas de calabaza, unos 400g apróximadamente.
- 4 zanahorias.
- 1 cucharadita de margarina light.
- Un chorrito de nala líquida.
- 2 quesitos light.
- Sal.
- Agua.
Elaboración:
1. Lavamos y cortamos a trocitos las hortalizas y las ponemos en una cacerola al fuego junto con la margarina light. Removemos bien a fuego medio, añadimos agua hasta cubrir las verduras, ponemos la sal y dejamos cocer unos 15 minutos.
2. Agregamos los quesitos light y dejamos cocer otros 5 minutos más, o hasta que veais que la verdura está hecha.
3. Una vez cocido retiramos la cacerola del fuego y batimos muy bien a velocidad fuerte hasta que el puré presente un aspecto cremoso, rectificamos de sal si es necesario y agregamos un chorrito de nata líquida.
4. Le damos otra batida, apartamos y servimos. Podemos acompañar la crema con unos picatostes, los cuales venden en cualquier supermercado.
¡Ya solo queda disfrutar de de esta deliciosa crema de calabaza que está exquisita!
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